La Red Campus Sustentable concentra más del 50 % de las matrículas de pregrado: “la clave es y será la colaboración”
En esta entrevista, la Presidenta del directorio de la Red Campus Sustentable, Nélida Ramirez Naranjo, recalcó la importancia de la cifra, que posiciona a la Red como el referente que agrupa al mayor número de instituciones de educación superior en pos de la sustentabilidad a nivel nacional. Sin embargo, enfatiza en que el cambio no debe ser solo cuantitativo, sino que debe permear en prácticas concretas tales como la incorporación de la sustentabilidad en los modelos educativos de cada una de las IES.
Este año la Red Campus Sustentable (RCS) ha alcanzado máximos históricos. Según indica el Consejo Nacional de Educación (CNED), la matrícula total de pregrado para este 2021 asciende a 1.194.581 alumnos. Una cifra que, según indica el Ministerio de Educación, se encuentra repartida en 149 instituciones de educación superior, de las cuales 34 ya son parte de la Red Campus Sustentable. En total, hablamos de una representación del 50.29 % del alumnado, lo que se traduce en casi 601 mil estudiantes.
Nélida, ¿estaba dentro de las proyecciones de la Red llegar a este nivel de convocatoria?
Tenemos siempre la expectativa de invitar a participar a la Red a la máxima cantidad de instituciones de educación superior de Chile, esa es nuestra meta. Hemos tenido un avance bastante progresivo, sobre todo los últimos 3 años. Es importante recordar que partimos inicialmente 12 y hoy somos 34. La cifra de este 2021 entonces es un avance muy relevante, rápido, pero por sobre todas las cosas, es desafiante (…) considerando que algunas de nuestras instituciones tienen sede en todo Chile.
Debemos complementar este número con el aspecto cualitativo: si tenemos más de un 50% de la matrícula estamos abarcando a un número importante, lo que nos da la posibilidad de hacer un cambio cultural respecto a lo que estamos viviendo como emergencia climática. Es importante complementar lo cuantitativo con lo cualitativo
Más allá del speech
Hoy la Red representa más del 50% de la matrícula, ¿cuál es la meta para el futuro?
Mientras más podamos mejor, pero también tenemos que ser realistas. Por mucho que nosotros intentemos acciones, difundamos y convoquemos, gran parte va a depender de quienes son los tomadores de decisiones de las instituciones de educación superior. Mientras más nos sumemos, para nosotros es mucho mejor, pero también es importante que la institución tenga una conexión consecuente. A veces pasa que se declara algo, pero eso no se visualiza en la práctica. No es solamente que quede como un speech o buen slogan, porque hoy muchos jóvenes están muy conscientes de la emergencia climática: están seleccionando una u otra institución dependiendo si esta incorpora o no a la sustentabilidad. Por otro lado, creo que las instituciones se van a ir sumando a medida que vayan descubriendo que nosotros existimos, y que tienen un camino que no parte de cero, porque nuestra lógica es la de la colaboración, el conocimiento y las buenas prácticas de algunas se comparte para todas. Yo creo que eso también va a ir generando una sumatoria para llegar en algún momento al 100% – de la matrícula-, pero repito: no es sólo lo cuantitativo, es también lo cualitativo.
Para saltar desde lo cuantitativo hacia lo cualitativo, ¿Qué acciones debe tomar la Red para que este 50.29% se traduzca en una integración real de la sustentabilidad en la Educación Superior?
Ahí hay varios caminos que podemos tomar. El primero es uno que da un sustento muy importante, y es que las instituciones de educación superior incorporen la sustentabilidad en su proyecto formativo o modelo educativo, un documento que define con claridad las competencias sellos del perfil de egreso y la estrategias didácticas para lograrlas. Si una de las competencias sello que caracteriza a la institución de educación superior tiene que ver con la sustentabilidad, entonces ahí tenemos una primera etapa del camino hacia la educación para la sustentabilidad cubierto. Pero este camino es uno de los más difíciles, porque significa que hay una convicción de parte delas autoridades de la institución por esta apuesta hacia la sustentabilidad.
El segundo camino es que los estudiantes soliciten y promuevan la incorporación de talleres y cursos para tener más conocimientos respecto de las temáticas relacionadas a la sustentabilidad. Estas son dinámicas que parten desde abajo hacia arriba. También ocurre que hay muchas carreras, de distintas disciplinas, que han incorporado los contenidos de la sustentabilidad es su proyecto formativo. Ese es otro elemento interesante, que nos demuestra que no estamos partiendo de cero, porque hay instituciones que tienen de manera transversal cursos específicos y electivos de formación general abiertos para todos los estudiantes. Entonces, para lograr incluir la sustentabilidad en el modelo educativo, no significa que sólo debamos establecer una asignatura única, sino que además podamos sumar todas las otras propuestas y alternativas que están ya instaladas, y de esa manera, hacer una mirada colectiva que no sea solamente contar con un curso de sustentabilidad.
Además, un curso se quedaría muy por debajo de los requerimientos, nosotros necesitamos algo bastante mayor, esto porque nuestros estudiantes son los tomadores de decisiones desde ahora hacia el futuro, por sus decisiones va a pasar mucho de lo que ahora tenemos, y lo que debemos cambiar.
La colaboración es la clave
Nélida, debido al progresivo crecimiento que ha tenido la Red, que incorpora cada vez más instituciones, ¿cómo mantener alineada y viva la misión educativa en una organización cada día más grande?
Efectivamente, nosotros tenemos muy claro que hay desafíos y que han surgido justamente de este crecimiento que hemos tenido en estos últimos años. Vamos a necesitar por supuesto un rediseño organizacional, es decir, no podemos seguir funcionando con un grupo pequeño de personas, sino que vamos a tener que ampliar el número de profesionales dedicados al apoyo y acompañamiento.
Además, en nuestra estructura de grupos de trabajo, con temáticas y proyectos diferenciados, hay un nicho que potenciar muy importante: esto ya que cada grupo va haciendo sus avances, y estos a su vez van aportando también a la agenda pública. Esto va en concordancia con lo que es la Red: un referente importante para las instituciones de educación superior en Chile, no sólo por nuestros números, sino que también por las propuestas que hemos ido generando.
Contamos con el Reporte de Sustentabilidad en Instituciones de Educación Superior (RESIES), que es un diagnóstico o fotografía inicial, pero que constituye una verdadera hoja de ruta para avanzar si analizamos cada una de sus acciones, su contenido, y en qué plazos se deben cumplir. Además, nuestro II Acuerdo de Producción Limpia se encuentra alineado con RESIES, y se ha constituido en una política pública, lo cual es una experiencia bastante transformadora en nuestro contexto.
Pero, sin duda, lo más importante es mantener la colaboración, como la fórmula clave para trabajar en nuestros propósitos. Hay una característica importante en los miembros de la Red, que es muy particular: nosotros nunca vamos a competir, vamos a estar siempre atentos a celebrar los avances que cada institución hace, aunque sean grandes o pequeños pasos. Esto nos va generando una mística distinta. Al tener muchas instituciones, pretendemos que esto se mantenga, pero debemos tener también claro también que, en el fondo, esto requiere adaptación y ser proactivos. Estoy segura que hay espacio para todos en la Red, y que cada uno que se va incorporando, se va ubicando en su área de interés y va colaborando desde ahí.