Educación al servicio de la sustentabilidad
Conversamos con Viviana Contreras Cabezas, académica del diplomado “Fundamentos de la Sustentabilidad”, desarrollado por Red Campus Sustentable (RCS), sobre su visión respecto al vínculo que existe entre un desarrollo sustentable y la educación. Así como su mirada a nivel país y mundial en estas áreas.
Viviana es profesional en el área de las Ciencias biológicas: Ecología, Conservación, Medicina Animales Exóticos, Sustentabilidad y Educación Ambiental, que actualmente es parte del Programa de sustentabilidad de la Universidad Tecnológica Metropolitana (UTEM).
Tal como ella misma señala, “La educación es la única arma que puede cambiar al mundo, ya que quién conoce respecto de una especie o situación, cuidará de esta al asumir su empatía.”
¿Qué elementos o circunstancias le llevaron a interesarse por la sustentabilidad?
Por mi inquietud como docente de Ecología y Medio ambiente. A fines del año 2009 me acerque a la CONAMA (actual Ministerio de Medio Ambiente) y me comentaron de un grupo de profesores de diversas Universidades que estaban reuniéndose para trabajar de manera conjunta en temas de Educación Ambiental, desde ese momento soy parte de este movimiento de fundadores de la Red Campus Sustentable.
¿De qué manera aborda en la docencia el ámbito sustentable?
En mi asignatura del diplomado promuevo de forma transversal conceptos cognitivos relacionados a la sustentabilidad, aplicando metodologías activas y promoviendo el análisis reflexivo de los estudiantes en cuanto a su quehacer y toma de decisiones en el día a día.
¿Cómo ha sido su experiencia como docente en el diplomado Fundamentos de la Sustentabilidad?
Fue una experiencia grata y enriquecedora ver el entusiasmo de los asistentes, darme cuenta que existe un grupo diverso, en cuanto a generación y ámbito profesional, que tiene un tema en común y la preocupación esperanzadora de cambiar el paradigma y promover la sustentabilidad.
¿Qué cambios ocurridos en los últimos años a nivel de educación y social relacionados con la sustentabilidad destacaría?
Desde la década de los noventa la humanidad vive un periodo de transformación, las comunidades están más empoderadas y expresan su malestar a los estados cuando ven que existen conflictos socioambientales que atentan contra cualquier expresión de vida, como sucede con el Cambio Climático, pero no es hasta el año 2011, con la conceptualización de los Objetivos del Milenio, que los países han asumido diversos compromisos.
¿Qué competencias cree necesarias para los docentes que forman a los próximos profesionales?
Todo profesional debe contar con una mirada integral, ética y coherente en el ser y quehacer asociada a la materia. Tener capacidad de empatía y motivación a través de metodologías activas, participativas, reflexivas y transformacionales que brinden a los futuros profesionales las herramientas para generar el cambio que esperamos.
¿Cómo ve el compromiso e interés de los estudiantes en materias de sustentabilidad?
Considero que existe un grupo que está muy preocupado por la proyección del futuro, sin embargo hay otro grupo no menor que aún no ha vislumbrado la necesidad de promover este cambio cultural, para asegurar que las futuras generaciones disfruten de un bienestar humano.
¿Qué desafíos ve para las generaciones actuales y venideras en el área de la sustentabilidad?
Asumir y promover un cambio cultural con compromiso real de competencias procedimentales y actitudinales frente a los diversos procesos del quehacer, a fin de mitigar el impacto socioambiental. Así como a futuro manejar nuevas tecnologías más eficientes; innovar y emprender en proyectos que promuevan un bien común.
¿Qué opina acerca del rol que cumple el gobierno y las empresas en el desarrollo de una sociedad sustentable? ¿Qué desafíos ve en esta área?
El estado cumple un rol fundamental en promover un cambio de paradigma, sin embargo falta que asuma un compromiso real desde las bases e inyecte recursos para promover los Objetivos del Desarrollo Sostenible (ODS) en los diversos ámbitos, que genere cambios y actualización de la Constitución a modo de velar por un bien común.
Por su parte las empresas deberían asumir modelos de producción limpia, con claros fines de promover la responsabilidad social empresarial, para sus propios trabajadores y las comunidades.